José
Melchor Hernández Castilla, Secretario de la Asociación Wolfgang Köhler.
El
Plan Hidrológico Insular del Cabildo de Tenerife recoge la creación de un
depósito de 13.000 metros cúbicos de capacidad junto a la infraestructura de
Mar Dulce, situado en el barranco de la Raya (entre La Orotava y Los Realejos),
Boletín Oficial de Canarias de 14 de febrero de 1997. El actual depósito de Mar
Dulce tiene una capacidad de 2.000 metros cúbicos de agua, procedente de los
canales de Roque Caramujo y Rambla Orotava.
En
el año 2002, en el periódico EL DIA, de 23 de junio de 2002 se plasma la
siguiente información “El Plan Hidrológico Insular del Cabildo tinerfeño recoge
la creación de un depósito de trece mil metros cúbicos de capacidad junto a la
infraestructura de Mar Dulce”, además de un nuevo depósito con capacidad para
8.200 metros cúbicos en Piedras Blancas (La Vera); sin embargo, el propio
Consejo Insular de Aguas decide alrededor de 2004 no construir el nuevo depósito
junto a Mar Dulce, pero sí el de Piedras Blancas (La Vera), en el propio
barranco San Felipe –véase barranco La Raya- (Diario de Avisos, 13 de abril de
2004).
El
27 de diciembre de 2012, se anuncia que “El barro en el depósito Mar Dulce
impide beber agua en cinco barrios” (Diario de Avisos); y el 9 de marzo de
2014, Raúl Sánchez escribe en el periódico EL DIA “el área de salud de Tenerife tiene claro que
la solución al problema del agua en las zonas que se abastecen del depósito de
Mar Dulce pasa por mejorar la calibración del tubidímetro (mide la presencia de
partículas en el agua) ya instalado y, especialmente, por colocar nuevos
filtros, que son obligatorios por ley, para reducir la turbidez”.
Dos
problemas básicos asolan actualmente el agua del Puerto de la Cruz, uno es la
turbidez, la cual es necesaria eliminar para que el agua sea potable; y otro
son los nitratos, que en determinadas circunstancias se pueden convertir en
nitritos en el cuerpo.
El
Plan Hidrológico de Tenerife preveía la construcción de una estación
experimental para reducir la concentración de nitratos en el depósito regulador
de La Vera y también un depósito de 13.000 metros cúbicos junto al depósito de
Mar Dulce en el año 1997. Parece que el Consejo Insular de Aguas no ha
realizado ninguna de las dos cosas, y los portuenses seguiremos sufriendo las
consecuencias de la turbidez del agua y de los nitratos en el agua mientras no
se construyan sendas infraestructuras.
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